REFLEXIONEMOS

PARA REFLEXIONAR

Una de las reflexiones sobre la naturaleza humana, es la que se refiere a la soledad, definida por varios autores desde sus bondades hasta sus desventajas, pero sobre todo como un estado que no debe evitarse en la realidad, sino aprender a vivir en su compañía.
Por naturaleza el ser humano es social y necesita de los otros para establecer relaciones personales,para interactuar con los semejantes, para desarrollar actitudes de solidaridad,colaboración y para vivir en forma placentera y satisfactoria.
Históricamente la soledad se asocia con el desarrollo espiritual para hacer florecer la originalidad, la creatividad, la genialidad o el encuentro consigo mismo.
Pero también se dice que la soledad es una de las fuentes de sufrimiento para el ser humano y se ha concebido como un estado subjetivo que según Montero Sánchez Sosa 2001,”contrasta con la condición de aislamiento, que surge como una respuesta a la falta de una relación particular e implica un desequilibrio entre el nivel deseado de una interacción socio afectiva y el logrado,sus consecuencias pueden afrontarse de manera positiva o negativa.”
El afrontar depende en gran medida de los recursos individuales y sociales que tenga la persona, así como de sus habilidades y actitudes para evitar el impacto negativo generado por la situación.
Estudios de corte psicológico resaltan que el sentimiento de soledad afecta negativamente la salud física, mental y deterioro cognitivo y el riesgo a la demencia.
Desde otra perspectiva, la O.M.S. señala que enfermedades vasculares como la diabetes,la hipertensión,la obesidad en la mediana edad,el tabaquismo y la inactividad física ,contribuyen a desarrollar y sufrir el deterioro cognitivo y por ende la demencia.
Todos sabemos que a lo largo de la vida se experimentan momentos que nos generan goce,creatividad o momentos de una inquietante amargura al estar solos y sentirnos solos.
Particularmente,la vejez es una etapa de la vida, en que las personas mayores están sujetas a una serie de cambios y presiones que le causan una soledad emocional ,una soledad de familia o una soledad conyugal, unido a estas la época actual de personas solitarias,circunstancias estas que afloran un malestar emocional, porque la persona se siente excluida, por no tener acceso al mundo de la interacción, de la comunicación,por sentirse incomprendida o rechazada,por carecer de una compañía para las actividades deseadas, tanto en el orden físico,como intelectual o para lograr una intimidad emocional.
Ante esta dura realidad cada persona la afronta en forma diferente, lo importante es no sucumbir en la soledad del sufrimiento y reflexionar para replantear la percepción frente a la soledad, sin evadir su inevitable presencia en nuestra vida.
Nos interrogamos entonces: Cuál puede ser el camino o la estrategia a seguir? La persona mayor,por ejemplo en esta circunstancias puede,convertir su rol diario en mejorar y conseguir nuevas relaciones personales e interpersonales en forma verbal y no verbal, expresar sus deseos, tener sentimientos de pertenencia a un grupo, tener una imagen positiva de sí mismo, expresar sus temores,sus sexualidad, mantener empatía y la motivación de nuevos aprendizajes,aspectos estos que pueden contribuir a la construcción de metas y retos deseables, para el logro de una mejor calidad de vida.
El sentimiento de soledad no siempre es negativo o lesivo personalmente destinar un tiempo asumido como soledad deseada, es una opción personal que puede ser gratificante porque se fomenta el disfrute de un bienestar emocional y espiritual y lo deseable es es lograr ciertos momentos de intimidad para uno mismo.
Podemos concluir que uno de los aspectos que contribuyen al bienestar general de una persona depende en gran medida de sus vínculos de amistad con los demás.Particularmente la socialización durante la vejez tiene efectos favorables en determinadas patologías como lo refiere el Dr: David Curto,Jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores,señala la reducción de los riesgos neurodegenerativos y el deterioro cognitivo.
En otro sentido la socialización en esta etapa del proceso de envejecimiento, mejora las habilidades cognitivas,el valor de la autonomía,el desarrollo del sentido de pertenencia a un grupo,favorece el disfrute del tiempo libre,aumenta el sentimiento de seguridad y promueve el aprendizaje.
Seleccionemos la dosis de soledad que nos siente bien,para percibir su presencia como una deliciosa compañía, que contrarreste el bullicio mental ,la ansiedad, el estrés, que puedan surgir en la cotidianidad.
Reflexionemos.Hasta pronto.

BIBLIOGRAFIA:

Ano europeo de envejecimiento activo y de solidaridad internacional.wwwenvejecimientoactivo2012.net/
Martin Rodriguez Marta.La soledad en el anciano.
Fundacion EROSKI. La soledad elegida y la que no se elige.
Del Villar Barros Javier.Sobre los beneficios probados de la soledad.2013.
ASCADA.Rodríguez A,Jose.La soledad aumenta el riesgo de la demenci
PARA REFLEXIONAR

Una de las reflexiones sobre la naturaleza humana, es la que se refiere a la soledad, definida por varios autores desde sus bondades hasta sus desventajas, pero sobre todo como un estado que no debe evitarse en la realidad, sino aprender a vivir en su compañía.
Por naturaleza el ser humano es social y necesita de los otros para establecer relaciones personales,para interactuar con los semejantes, para desarrollar actitudes de solidaridad,colaboración y para vivir en forma placentera y satisfactoria.
Históricamente la soledad se asocia con el desarrollo espiritual para hacer florecer la originalidad, la creatividad, la genialidad o el encuentro consigo mismo.
Pero también se dice que la soledad es una de las fuentes de sufrimiento para el ser humano y se ha concebido como un estado subjetivo que según Montero Sánchez Sosa 2001,”contrasta con la condición de aislamiento, que surge como una respuesta a la falta de una relación particular e implica un desequilibrio entre el nivel deseado de una interacción socio afectiva y el logrado,sus consecuencias pueden afrontarse de manera positiva o negativa.”
El afrontar depende en gran medida de los recursos individuales y sociales que tenga la persona, así como de sus habilidades y actitudes para evitar el impacto negativo generado por la situación.
Estudios de corte psicológico resaltan que el sentimiento de soledad afecta negativamente la salud física, mental y deterioro cognitivo y el riesgo a la demencia.
Desde otra perspectiva, la O.M.S. señala que enfermedades vasculares como la diabetes,la hipertensión,la obesidad en la mediana edad,el tabaquismo y la inactividad física ,contribuyen a desarrollar y sufrir el deterioro cognitivo y por ende la demencia.
Todos sabemos que a lo largo de la vida se experimentan momentos que nos generan goce,creatividad o momentos de una inquietante amargura al estar solos y sentirnos solos.
Particularmente,la vejez es una etapa de la vida, en que las personas mayores están sujetas a una serie de cambios y presiones que le causan una soledad emocional ,una soledad de familia o una soledad conyugal, unido a estas la época actual de personas solitarias,circunstancias estas que afloran un malestar emocional, porque la persona se siente excluida, por no tener acceso al mundo de la interacción, de la comunicación,por sentirse incomprendida o rechazada,por carecer de una compañía para las actividades deseadas, tanto en el orden físico,como intelectual o para lograr una intimidad emocional.
Ante esta dura realidad cada persona la afronta en forma diferente, lo importante es no sucumbir en la soledad del sufrimiento y reflexionar para replantear la percepción frente a la soledad, sin evadir su inevitable presencia en nuestra vida.
Nos interrogamos entonces: Cuál puede ser el camino o la estrategia a seguir? La persona mayor,por ejemplo en esta circunstancias puede,convertir su rol diario en mejorar y conseguir nuevas relaciones personales e interpersonales en forma verbal y no verbal, expresar sus deseos, tener sentimientos de pertenencia a un grupo, tener una imagen positiva de sí mismo, expresar sus temores,sus sexualidad, mantener empatía y la motivación de nuevos aprendizajes,aspectos estos que pueden contribuir a la construcción de metas y retos deseables, para el logro de una mejor calidad de vida.
El sentimiento de soledad no siempre es negativo o lesivo personalmente destinar un tiempo asumido como soledad deseada, es una opción personal que puede ser gratificante porque se fomenta el disfrute de un bienestar emocional y espiritual y lo deseable es es lograr ciertos momentos de intimidad para uno mismo.
Podemos concluir que uno de los aspectos que contribuyen al bienestar general de una persona depende en gran medida de sus vínculos de amistad con los demás.Particularmente la socialización durante la vejez tiene efectos favorables en determinadas patologías como lo refiere el Dr: David Curto,Jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores,señala la reducción de los riesgos neurodegenerativos y el deterioro cognitivo.
En otro sentido la socialización en esta etapa del proceso de envejecimiento, mejora las habilidades cognitivas,el valor de la autonomía,el desarrollo del sentido de pertenencia a un grupo,favorece el disfrute del tiempo libre,aumenta el sentimiento de seguridad y promueve el aprendizaje.
Seleccionemos la dosis de soledad que nos siente bien,para percibir su presencia como una deliciosa compañía, que contrarreste el bullicio mental ,la ansiedad, el estrés, que puedan surgir en la cotidianidad.
Reflexionemos.Hasta pronto.

BIBLIOGRAFIA:

Ano europeo de envejecimiento activo y de solidaridad internacional.wwwenvejecimientoactivo2012.net/
Martin Rodriguez Marta.La soledad en el anciano.
Fundacion EROSKI. La soledad elegida y la que no se elige.
Del Villar Barros Javier.Sobre los beneficios probados de la soledad.2013.
ASCADA.Rodríguez A,Jose.La soledad aumenta el riesgo de la demenci
PARA REFLEXIONAR

Una de las reflexiones sobre la naturaleza humana, es la que se refiere a la soledad, definida por varios autores desde sus bondades hasta sus desventajas, pero sobre todo como un estado que no debe evitarse en la realidad, sino aprender a vivir en su compañía.
Por naturaleza el ser humano es social y necesita de los otros para establecer relaciones personales,para interactuar con los semejantes, para desarrollar actitudes de solidaridad,colaboración y para vivir en forma placentera y satisfactoria.
Históricamente la soledad se asocia con el desarrollo espiritual para hacer florecer la originalidad, la creatividad, la genialidad o el encuentro consigo mismo.
Pero también se dice que la soledad es una de las fuentes de sufrimiento para el ser humano y se ha concebido como un estado subjetivo que según Montero Sánchez Sosa 2001,”contrasta con la condición de aislamiento, que surge como una respuesta a la falta de una relación particular e implica un desequilibrio entre el nivel deseado de una interacción socio afectiva y el logrado,sus consecuencias pueden afrontarse de manera positiva o negativa.”
El afrontar depende en gran medida de los recursos individuales y sociales que tenga la persona, así como de sus habilidades y actitudes para evitar el impacto negativo generado por la situación.
Estudios de corte psicológico resaltan que el sentimiento de soledad afecta negativamente la salud física, mental y deterioro cognitivo y el riesgo a la demencia.
Desde otra perspectiva, la O.M.S. señala que enfermedades vasculares como la diabetes,la hipertensión,la obesidad en la mediana edad,el tabaquismo y la inactividad física ,contribuyen a desarrollar y sufrir el deterioro cognitivo y por ende la demencia.
Todos sabemos que a lo largo de la vida se experimentan momentos que nos generan goce,creatividad o momentos de una inquietante amargura al estar solos y sentirnos solos.
Particularmente,la vejez es una etapa de la vida, en que las personas mayores están sujetas a una serie de cambios y presiones que le causan una soledad emocional ,una soledad de familia o una soledad conyugal, unido a estas la época actual de personas solitarias,circunstancias estas que afloran un malestar emocional, porque la persona se siente excluida, por no tener acceso al mundo de la interacción, de la comunicación,por sentirse incomprendida o rechazada,por carecer de una compañía para las actividades deseadas, tanto en el orden físico,como intelectual o para lograr una intimidad emocional.
Ante esta dura realidad cada persona la afronta en forma diferente, lo importante es no sucumbir en la soledad del sufrimiento y reflexionar para replantear la percepción frente a la soledad, sin evadir su inevitable presencia en nuestra vida.
Nos interrogamos entonces: Cuál puede ser el camino o la estrategia a seguir? La persona mayor,por ejemplo en esta circunstancias puede,convertir su rol diario en mejorar y conseguir nuevas relaciones personales e interpersonales en forma verbal y no verbal, expresar sus deseos, tener sentimientos de pertenencia a un grupo, tener una imagen positiva de sí mismo, expresar sus temores,sus sexualidad, mantener empatía y la motivación de nuevos aprendizajes,aspectos estos que pueden contribuir a la construcción de metas y retos deseables, para el logro de una mejor calidad de vida.
El sentimiento de soledad no siempre es negativo o lesivo personalmente destinar un tiempo asumido como soledad deseada, es una opción personal que puede ser gratificante porque se fomenta el disfrute de un bienestar emocional y espiritual y lo deseable es es lograr ciertos momentos de intimidad para uno mismo.
Podemos concluir que uno de los aspectos que contribuyen al bienestar general de una persona depende en gran medida de sus vínculos de amistad con los demás.Particularmente la socialización durante la vejez tiene efectos favorables en determinadas patologías como lo refiere el Dr: David Curto,Jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores,señala la reducción de los riesgos neurodegenerativos y el deterioro cognitivo.
En otro sentido la socialización en esta etapa del proceso de envejecimiento, mejora las habilidades cognitivas,el valor de la autonomía,el desarrollo del sentido de pertenencia a un grupo,favorece el disfrute del tiempo libre,aumenta el sentimiento de seguridad y promueve el aprendizaje.
Seleccionemos la dosis de soledad que nos siente bien,para percibir su presencia como una deliciosa compañía, que contrarreste el bullicio mental ,la ansiedad, el estrés, que puedan surgir en la cotidianidad.
Reflexionemos.Hasta pronto.

BIBLIOGRAFIA:

Ano europeo de envejecimiento activo y de solidaridad internacional.wwwenvejecimientoactivo2012.net/
Martin Rodriguez Marta.La soledad en el anciano.
Fundacion EROSKI. La soledad elegida y la que no se elige.
Del Villar Barros Javier.Sobre los beneficios probados de la soledad.2013.
ASCADA.Rodríguez A,Jose.La soledad aumenta el riesgo de la demenci
PARA REFLEXIONAR

Una de las reflexiones sobre la naturaleza humana, es la que se refiere a la soledad, definida por varios autores desde sus bondades hasta sus desventajas, pero sobre todo como un estado que no debe evitarse en la realidad, sino aprender a vivir en su compañía.
Por naturaleza el ser humano es social y necesita de los otros para establecer relaciones personales,para interactuar con los semejantes, para desarrollar actitudes de solidaridad,colaboración y para vivir en forma placentera y satisfactoria.
Históricamente la soledad se asocia con el desarrollo espiritual para hacer florecer la originalidad, la creatividad, la genialidad o el encuentro consigo mismo.
Pero también se dice que la soledad es una de las fuentes de sufrimiento para el ser humano y se ha concebido como un estado subjetivo que según Montero Sánchez Sosa 2001,”contrasta con la condición de aislamiento, que surge como una respuesta a la falta de una relación particular e implica un desequilibrio entre el nivel deseado de una interacción socio afectiva y el logrado,sus consecuencias pueden afrontarse de manera positiva o negativa.”
El afrontar depende en gran medida de los recursos individuales y sociales que tenga la persona, así como de sus habilidades y actitudes para evitar el impacto negativo generado por la situación.
Estudios de corte psicológico resaltan que el sentimiento de soledad afecta negativamente la salud física, mental y deterioro cognitivo y el riesgo a la demencia.
Desde otra perspectiva, la O.M.S. señala que enfermedades vasculares como la diabetes,la hipertensión,la obesidad en la mediana edad,el tabaquismo y la inactividad física ,contribuyen a desarrollar y sufrir el deterioro cognitivo y por ende la demencia.
Todos sabemos que a lo largo de la vida se experimentan momentos que nos generan goce,creatividad o momentos de una inquietante amargura al estar solos y sentirnos solos.
Particularmente,la vejez es una etapa de la vida, en que las personas mayores están sujetas a una serie de cambios y presiones que le causan una soledad emocional ,una soledad de familia o una soledad conyugal, unido a estas la época actual de personas solitarias,circunstancias estas que afloran un malestar emocional, porque la persona se siente excluida, por no tener acceso al mundo de la interacción, de la comunicación,por sentirse incomprendida o rechazada,por carecer de una compañía para las actividades deseadas, tanto en el orden físico,como intelectual o para lograr una intimidad emocional.
Ante esta dura realidad cada persona la afronta en forma diferente, lo importante es no sucumbir en la soledad del sufrimiento y reflexionar para replantear la percepción frente a la soledad, sin evadir su inevitable presencia en nuestra vida.
Nos interrogamos entonces: Cuál puede ser el camino o la estrategia a seguir? La persona mayor,por ejemplo en esta circunstancias puede,convertir su rol diario en mejorar y conseguir nuevas relaciones personales e interpersonales en forma verbal y no verbal, expresar sus deseos, tener sentimientos de pertenencia a un grupo, tener una imagen positiva de sí mismo, expresar sus temores,sus sexualidad, mantener empatía y la motivación de nuevos aprendizajes,aspectos estos que pueden contribuir a la construcción de metas y retos deseables, para el logro de una mejor calidad de vida.
El sentimiento de soledad no siempre es negativo o lesivo personalmente destinar un tiempo asumido como soledad deseada, es una opción personal que puede ser gratificante porque se fomenta el disfrute de un bienestar emocional y espiritual y lo deseable es es lograr ciertos momentos de intimidad para uno mismo.
Podemos concluir que uno de los aspectos que contribuyen al bienestar general de una persona depende en gran medida de sus vínculos de amistad con los demás.Particularmente la socialización durante la vejez tiene efectos favorables en determinadas patologías como lo refiere el Dr: David Curto,Jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores,señala la reducción de los riesgos neurodegenerativos y el deterioro cognitivo.
En otro sentido la socialización en esta etapa del proceso de envejecimiento, mejora las habilidades cognitivas,el valor de la autonomía,el desarrollo del sentido de pertenencia a un grupo,favorece el disfrute del tiempo libre,aumenta el sentimiento de seguridad y promueve el aprendizaje.
Seleccionemos la dosis de soledad que nos siente bien,para percibir su presencia como una deliciosa compañía, que contrarreste el bullicio mental ,la ansiedad, el estrés, que puedan surgir en la cotidianidad.
Reflexionemos.Hasta pronto.

BIBLIOGRAFIA:

Ano europeo de envejecimiento activo y de solidaridad internacional.wwwenvejecimientoactivo2012.net/
Martin Rodriguez Marta.La soledad en el anciano.
Fundacion EROSKI. La soledad elegida y la que no se elige.
Del Villar Barros Javier.Sobre los beneficios probados de la soledad.2013.
ASCADA.Rodríguez A,Jose.La soledad aumenta el riesgo de la demenci

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